Un puente de San José pasado por agua, con frío, sin poder juntarnos... Pero bueno, no todo va a ser negativo. Hoy ha salido el sol, hace un día precioso que vamos a endulzar con estas tartaletas de hojaldre que preparé el otro día y que han gustado mucho, muchísimo. Con un plancha de hojaldre han salido doce piezas, por lo que además de un postre buenísimo, da para muchas personas. Os da tiempo a prepararlas para la merienda de esta tarde.
Ingredientes:- Una plancha de hojaldre
- 2 claras de huevo
- 150 gramos de azúcar
- Una cucharada de harina de maíz (Maizena)
- Una cucharada de vinagre blanco
- 200 gramos de chocolate para fundir
- 160 ml de nata
- Una cucharada de azúcar
- Una cucharada de mantequilla
- Un chorro de leche fría
- Pimienta de Jamaica
- Canela en polvo
- Ralladura de una naranja
- Azúcar moreno
- Fresas
Preparación:
Para hacer este postre, necesitáis o bien un molde para hacer magdalenas o flaneras para darle la forma de tartaletas. Siempre os queda la opción de comprarlas, pero no tendrán el sabor de estas.
Estiráis la plancha de hojaldre y la espolvoreáis con azúcar moreno, canela –a través de un colador–, ralladura de naranja y pimienta de Jamaica molida, que tiene un increíble sabor a canela, clavo, nuez moscada y pimienta. De hecho en algunos países la llaman pimienta dulce. Si no tenéis, no pasa nada, pero le da a las tartaletas un toque muy especial.
La enrolláis y la cortáis en rodajas de dos centímetros. Estas rodajas las estiráis con un rodillo hasta formar un pequeño círculo que iréis poniendo en la parte de abajo del molde de magdalenas y, si usáis flaneras, lo mismo. Acordaos de rociar los moldes con spray antiadherente. Os pongo una fotografía para que veáis como quedan:
Las metéis en el horno precalentado a 180 grados durante 15 minutos. Cuando estén doradas, las sacáis y las ponéis en una rejilla hasta que se enfríen.
Para preparar el chocolate, calentáis la nata y cuando empiece a hervir, la apartáis del fuego y volcáis en ella el chocolate troceado. Removéis con unas varillas hasta que se deshaga y, cuando lo haga, le añadís una cucharada de azúcar, una cucharada de mantequilla y un chorro de leche fría. Obtendréis una brillante crema de chocolate.
En el fondo de cada tartaleta ponéis dos cucharadas de este crema de chocolate y las reserváis mientras preparáis el merengue.
Batís las claras de huevo con unas varillas eléctricas, o con el robot que tengáis, a media velocidad con la mitad de los 150 gramos de azúcar. Cuando empiecen a burbujear, subís la velocidad y añadís el resto del azúcar mezclado con una cucharada de harina de maíz y una de vinagre hasta conseguir que las claras formen picos firmes.
Pasáis el merengue a una manga pastelera con una boquilla rizada y cubrís las tartaletas. Ya solo queda decorarlas con las fresas.
Observaciones:
Podéis ponerles frambuesas, arándanos, grosellas o unas cuantas de cada clase.
Si no tenéis manga pastelera, las rellenáis de merengue con una cuchara. No tendrán el mismo aspecto, pero sí el mismo sabor. Que nada os impida prepararlas.